Siempre
fiel a tu lado, capaz de borrar todas las equivocaciones que hace el lápiz y de
dejar el papel más blanco de lo que estaba. He sido muy útil en
bastantes momentos y te he ayudado tras los errores. Pero esto no es
suficiente para ti. Ya que varias veces después... he sido maltratada, pintada,
rota, pinchada y en ciertas ocasiones hasta mordida! Aunque me duela,
sigo siendo tu goma de borrar con la que arreglas fallos y limpias
sandeces.
No te das cuenta de todo lo que me necesitas, hasta que un día caigo al suelo
y me pierdes. Allí soy pisoteada, lanzada y ensuciada. Tras pasar unas horas, sola en
la inmundicia. Me encuentras. Pero ya no te sirvo, estoy sucia.
En vez de limpiar equivocaciones las empeoro y el papel ya no vuelve a ser
blanco si yo lo toco. Es entonces cuando me lazas por la ventana y me dejas en
manos de la suerte.
Pero para serte sincera en manos de la suerte es donde mejor puedo estar, sin saber lo que me deparará el mañana. Así que siendo tu goma de borrar o la de otro, te aseguro que yo seguiré siento más que útil.